Por María Teresa González Osorio
Esta pregunta, personalmente me pone a pensar en ¿cuáles son mis prioridades? y con cuánta calidad en el tiempo le dedico a los hij@s?
Como adultos, independientemente de si somos o no madres y padres, la capacidad de juego libre, espontáneo, dónde ha quedado? Aprender de los pequeños/as, y reconocer en ellos también su sabiduría, puede ayudarnos a seguir creciendo como personas.