Disfruta tu café

Autor anónimo

Un grupo de profesionales, todos triunfadores en sus respectivas carreras, se reunió para visitar a su antiguo profesor. Pronto la charla devino en quejas acerca del interminable stress que les producía el trabajo y la vida en general.

Foto: cortesía de Jackie TL

El profesor les ofreció café, fue a la cocina y pronto regresó con una cafetera grande y una selección de tazas de lo más ecléctica: de porcelana, plástico, vidrio, cristal, unas sencillas y baratas, otras decoradas, unas caras, otras realmente exquisitas… Tranquilamente les dijo que escogieran una taza y se sirvieran un poco del café recién preparado.

Cuando lo hubieron hecho, el viejo maestro se aclaró la garganta y con mucha calma y paciencia se dirigió al grupo: “Se habrán dado cuenta de que todas las tazas que lucían bonitas se terminaron primero y quedaron pocas de las más sencillas y baratas; lo que es natural, ya que cada quien prefiere lo mejor para sí mismo. Ésa es realmente la causa de muchos de sus problemas relativos al estrés.”

Continuó: “Les aseguro que la taza no le añadió calidad al café. En verdad la taza solamente disfraza o reviste lo que bebemos. Lo que ustedes querían era el café, no la taza, pero instintivamente buscaron las mejores. Después se pusieron a mirar las tazas de los demás.”

Los asistentes escuchaban atentamente al profesor, quien siguió hablando con tranquilidad: “Ahora piensen en esto: La vida es el café. Los trabajos, el dinero, la posición social, etc. son meras tazas, que le dan forma y soporte a la vida y el tipo de taza que tengamos no define ni cambia realmente la calidad de vida que llevemos. A menudo, por concentrarnos sólo en la taza dejamos de disfrutar el café. ¡Disfruten su café!”

Finalmente, expresó: “La gente más feliz no es la que tiene lo mejor de todo, sino la que hace lo mejor con lo que tiene; así pues, recuérdenlo:

  • Vivan de manera sencilla.
  • Tengan paz.
  • Amen y actúen generosamente.
  • Sean solidarios y solícitos.
  • Hablen con amabilidad.

El resto déjenselo a la Vida, la Vida es inteligente y sabe a dónde va.”